Como empresa hay muchos aspectos que cuidar, no solo en el aspecto del negocio en sí, sino en la limpieza de todas tus instalaciones. La presentación y la higiene de todo el sitio habla bien de ti y tu empresa.
Además, te preocupas por el bienestar de tus clientes y tus colaboradores, por lo que es prioridad ofrecer un ambiente de trabajo limpio, donde las personas se sientan seguras y confortables.
Pero, tal vez, has notado malos olores que provienen de las coladeras y los sanitarios; esto no es solo desagradable, también afecta a tu imagen, a la efectividad y felicidad de tus colaboradores, y una mala higiene puede acarrear enfermedades para los que se encuentren en el lugar.
Si tu instalación de fontanería está funcionando adecuadamente, no tiene porqué oler mal; hay que tener en cuenta que el origen del problema puede estar en varios lugares. Hay que identificar de dónde proceden estos olores, antes que nada.
Primero es recomendable realizar una pequeña investigación para saber de dónde proviene el mal olor. Si después de esto notas que viene de tus sanitarios o coladeras, puede que el mal olor se deba a estos motivos:
Se debe entender que los gases y malos olores salen de los desagües del baño, tanto de los sanitarios como de los desagües de los grifos.
Existen unas bacterias que causan el mal olor que tanto molesta, son llamadas: «bacterias sulfato reductoras anaerobias»; estas producen un gas conocido como sulfuro de hidrógeno, que es el causante de los malos olores y puede dañar los distintos elementos del baño.
Este gas se disuelve en el agua de los sanitarios o lavabos; luego, cuando se evapora por el lado que está en contacto con la atmósfera, se vuelve a convertir en gas, invadiendo el ambiente.
Esta situación puede llegar a ser peligrosa para sus clientes y sus colaboradores, si dejas que los gases tóxicos del drenaje se acumulen hasta filtrarse al interior de la empresa.
Existen diversos tipos de productos químicos de limpieza, con el fin de eliminar el mal olor en las tuberías; pero no es lo más recomendable utilizarlos sin más.
Primero, hay que conocer de qué están hechas las cañerías, para no agravar el problema deteriorándolas con un producto que no está indicado para ese material en concreto.
Además, algunos son muy nocivos o contaminantes para el medio ambiente; con un mal uso o utilizarlos en exceso puede traer consecuencias negativas en tu instalación de fontanería y el entorno de trabajo.
En estos casos lo mejor es confiar en expertos del aseo profesional, que conozcan sobre los correctos insumos de limpieza que necesitas y que, además, puedan ofrecer el mantenimiento correcto en la limpieza.
Asegúrate de que tus baños cuenten con la ventilación adecuada; es un punto importante para cuidar la higiene y que no sea más fácil que aparezcan los molestos malos olores.
Que se revise el estado de las juntas entre los sanitarios y las salidas de agua, además del estado de la junta entre el inodoro y el suelo, además del estado de las juntas del bote sifónico. Es importante cerciorarse de que se deja correr el agua habitualmente por las tuberías de cualquier elemento del baño conectado a ellas.
Si confías en expertos de aseo profesional, podrás contar con limpieza y desinfección, además de servicios integrados como mano de obra, consumibles y equipo. No tendrás que preocuparte por los malos olores ni perder tiempo en estos apartados que mencionamos anteriormente.
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